AGREDIERON AL INTENDENTE PRADES/ JORNADAS ALTAMENTE CONFLICTIVAS EN CALETA OLIVIA

Caleta Olivia se ha transformado (nuevamente) en una ciudad sitiada por los reclamos de trabajadores de diferentes actividades que demandan el cobro de sus haberes, reincorporación a sus puestos de trabajo y mejora salarial. 

Ayer hubo cortes de ruta desde tempranas horas de la mañana y se extendieron a lo largo de toda la jornada, provocando serios inconvenientes sobre el acceso a la ciudad desde el flanco norte.

En la manifestación confluyeron trabajadores petroleros y personas pertenecientes a los planes y cooperativistas que son tutelados por aquel Municipio, además de sumarse la movilización de ATE y ADOSAC que cumplían paro provincial de 48 horas. 

El caos fue de tal magnitud que ni siquiera los sectores que salieron a reclamar pudieron marchar por las calles de la ciudad, ya que los camioneros llevaron adelante contrapiquetes cruzando sus vehículos pesados en plena vía pública. 

Asimismo, se supo que los habitantes de la localidad padecieron cortes de agua y luz. 

Ante la gravedad de la situación, el propio intendente Facundo Prades concurrió a dialogar con los manifestantes, pero tuvo que retirarse en medios de insultos y amenazas de los reclamantes. 

Por su parte, el fiscal subrogante de Caleta Olivia, Lucas Colla, emitió un comunicado para que se despeje la ruta nacional 3, ingreso norte.

Para hoy se espera la presencia de Gendarmería Nacional. 

 

Sucesos

Cerca del mediodía se acercó al piquete el comisario de la Seccional Cuarta para leerles a los manifestantes lo que el fiscal federal subrogante de Caleta Olivia, Lucas Colla, emitió.

“Les notificamos el oficio”, dijo el comisario. “No me vengo a pelear con ustedes. Simplemente vengo a pedirles que descompriman el corte”, expresó el comisario. “Se está formando un caos, me llamaron de Puerto Deseado que hay un camión con oxígeno para el hospital y no pasa”, ejemplificó. 

Luego un oficial de Policía leyó el oficio del fiscal Colla, allí se daba cuenta que sólo se recurrirá a la “fuerza pública” cuando “todas las herramientas del Estado hayan fracasado”, refiriéndose a las negociaciones previas. 

También se les notificó a los piqueteros que lo que están haciendo es un delito tipificado en el Código Penal.

A todo esto, preocupaba la situación de camioneros que tienen mercadería con fecha de vencimiento de corto plazo. Incluso había varios camiones que transportaban ovejas, las cuales se encontraban sin agua, provocando problemas sanitarios. 

También hubo camiones con combustible provenientes de Comodoro Rivadavia, y otros que transportan nafta de Petrobras a la región que no pudieron pasar.

 

Anuncio 

En tanto, en la noche de ayer Prades anunció que, luego de varias jornadas de intensas gestiones, fueron enviados los fondos provenientes del Gobierno Provincial para abonar las ayudas financieras a los planes sociales y a las cooperativas.

Así, el viernes a partir de las 10 horas, en instalaciones de la Seccional Segunda de Policía se procederá al pago a todos los beneficiarios de los planes y cooperativas. 

Esto lo anunció luego de mantener comunicaciones telefónicas con autoridades provinciales, entre ellas la gobernadora Alicia Kirchner. 

Durante la tarde también se reunió con la juez federal Marta Yáñez, y con la Comisión Directiva del SOEMCO y delegados de los empleados municipales.

En este sentido hizo saber que en el transcurso de las próximas horas también se dispondrá de los fondos para poder abonar -en los primeros días de la semana que viene- el 17% que resta para la planta de empleados municipales.

Los fondos llegan a Caleta Olivia como aporte no reintegrable para déficit. 

 

Insultado 

En medio del caos, Prades se presentó en el piquete para decirle a los cooperativistas que no contaba con dinero para pagar sus haberes. 

Esto generó reacciones violentas de quienes se manifestaban. 

Una de las principales voceras del grupo, Fabiola Chávez, le propuso que al menos pagara las prestaciones a la gente que estaba en el piquete (alrededor de 200 de un total 3.000 de cooperativas y planes sociales), pero la respuesta fue la misma: no hay fondos.

A partir de ese momento el intercambio de posturas se hizo confuso y Prades decidió retirarse del lugar, flanqueado por sus colaboradores, mientras recibía fuertes insultos de los manifestantes.

Caminó unos cincuenta metros hasta un auto que lo esperaba en la mano de la avenida República, pero fue seguido por no más de diez manifestantes, entre ellos varias mujeres que golpearon el auto a puñetazos.

El jefe comunal descendió, como si quisiera reparar la situación, y alguien lo empujó, por lo cual sus colaboradores rápidamente le ordenaron que volviera a subir a auto y fue en ese momento que comenzaron a arrojarle piedras al auto que se alejó raudamente del lugar.

Más tarde, en la rotonda se hicieron presente parte de los dirigentes y afiliados de ATE y ADOSAC, quienes transmitieron su solidaridad a los cooperativistas.

En tanto, a lo largo de la jornada desde el Ejecutivo informaron que no está en el ánimo de Prades echar a ningún “Plan” o “cooperativista”. Es que se había difundido ese rumor por algunos medios radiales.

Incluso el propio concejal Rubén Martínez aclaró por su Facebook personal esa situación. “Como representante del pueblo de Caleta y como concejal quiero solicitar a los medios de comunicación que, ante la caótica situación que está pasando la ciudad, sean responsables con la constatación de la información que trasmiten. Porque en un medio se dijo que el intendente iba a echar gente de Planes y Cooperativas y yo mismo le pregunté al intendente y dijo que eso no era verdad”. 

 

Presencia de Gendarmería 

En este conflictivo escenario de crisis social, muchos camioneros esperaban desde hace dos días poder pasar Caleta Olivia en uno y otro sentido, ya que si bien la ruta se había abierto el martes a las 19:00, sólo fue por quince minutos, lapso insuficiente para descomprimir un total de casi quince kilómetros de tráfico pesado. 

La fila más extensa iba en dirección a Comodoro Rivadavia, en tanto que hacia la zona urbana había tres ramificaciones, una de las cuales bloqueaba a avenidas céntricas y otra la zona costanera.

Además, al menos hasta el cierre de esta edición, sólo hubo una apertura de otros quince minutos a partir de las 18:00, y cuando se anuló se produjo un descomunal sonido de bocinas de camioneros que continuaron bloqueados.

A todo esto, ya era vox pópuli que en base a requerimiento del Juzgado Federal de esta ciudad, el Ministerio de Seguridad de la Nación habría dispuesto la llegada de efectivos anti motines de Gendarmería Nacional, con expresas órdenes de liberar la ruta, procediendo con rigor en caso de ser necesario. (Fuente La Opinión Austral- La Vanguardia del Sur- Patagónico)